SHAFAQNA– Nahy-ul Balâghah Ḥikma 58
وَ قَالَ علی (علیه السلام): الْمَالُ مَادَّةُ الشَّهَوَاتِ
El Imam Ali (as) dijo: “La riqueza es el origen de las ansias inmoderadas.”
Etimología
- mādda (مَادَّة): materia, origen, componente.
- al-māl (الْمَالُ): dinero, riqueza, posesión.
- šahawāt (شَهَوَات): plural de šahwa (شَهْوَة), ansias inmoderadas; lujuria, mal anhelo; codicia.
Explicación de los sabios:
- “El Imam (la paz sea con él) dijo: La riqueza es la raíz de la concupiscencia. (Anṣāriān)
- Tema: Riqueza y ansias inmoderadas (moral): “El Imam dijo: La riqueza es la raíz de los deseos. (Dashtī)
- [Y él (la paz sea con él) dijo:] La riqueza es la sustancia de los deseos. (Shahīdī).
- El Imam (la paz sea con él) dijo: La riqueza es la fuente y el fundamento de los deseos y las concupiscencias (porque la riqueza deja la mano abierta para alcanzar los malos deseos) (Faīḍ al-islam).
- Imam (la paz sea con él) dijo: La riqueza y las posesiones son la fuente principal de todos los deseos. (A. Makārem Shīrāzī).
Explicación ampliada
- [Ḥabībullāh Khūī, “Minhāǧ al-barāʿa, Šarḥ Nahj al-Balāghah” 21, pág. 97]
“وَ قَالَ علی (علیه السلام): الْمَالُ مَادَّةُ الشَّهَوَاتِ”
Y dijo (la paz sea con él): “La riqueza es el origen de las ansias inmoderadas.”
El significado:
La šahwa (شَهْوَة), o deseo, es la búsqueda de lo que conviene a la naturaleza humana y a los instintos animales, como la comida, la ropa y el deseo sexual. Los deseos humanos más intensos son el amor a la fama, la dominación, la asunción del poder y la subyugación del prójimo. Todos estos deseos se derivan del dinero y la riqueza, y se ven reforzados por ellos, ya que requieren la preparación de causas y medios, y el dinero es la causa de las causas.
En un poema se dice:
Si hubiera un gobierno justo, la vejez no sería una pena y el mal deseo (šahwa) no llevaría un desperdicio de dinero.
- [Ibn Abī al-Ḥadīd, “Šarḥ Nahj al-Balāghah” 7, pág. 276]
“وَ قَالَ علی (علیه السلام): الْمَالُ مَادَّةُ الشَّهَوَاتِ”
Y dijo (la paz sea con él): “La riqueza es el capital de todos los deseos.”
En el pasado, hablamos de criticar y elogiar la riqueza. Un árabe que vivía en el desierto dijo a sus hijos: «Reunid los dirhams, que son los medios para vestirlos con ropa fina y alimentarlos con migas de pan».
Se ha dicho: Tres personas prefieren la riqueza a la vida: un marino mercante, un guerrero mercenario y alguien que acepta sobornos para emitir un veredicto. Éste es el peor de todos, porque los otros dos podrían no estar a salvo del pecado como el tercero.
Al mismo tiempo, han dicho: Dios Todopoderoso ha llamado buena a la riqueza en Sus palabras donde dice: ” Si queda algo bueno” y donde dice: “Él es firme en amar el bien de la riqueza.”
- [Ibn Maytham al- Baḥrānī, “Šarḥ Nahj al-Balāghah”]
“وَ قَالَ علی (علیه السلام): الْمَالُ مَادَّةُ الشَّهَوَاتِ”
Y dijo (la paz sea con él): “La riqueza es el origen de las ansias inmoderadas.”
Significado: La riqueza causa fuerza y aumenta los deseos. La materia es lo mismo que la abundancia. Esta afirmación trata sobre la aversión al deseo excesivo de riquezas y posesiones, porque ayuda y fortalece la lujuria contra la desobediencia a la razón y al razonamiento.
- [Ayatollah Makārem Shīrāzī, “Payām Imām Amīr Al-Mūminīn”]
“وَ قَالَ علی (علیه السلام): الْمَالُ مَادَّةُ الشَّهَوَاتِ”
La raíz de los deseos:
En este breve y significativo discurso, el Imam (la paz sea con él) se refiere a un punto sobre la relación entre la riqueza y la lujuria, diciendo: “La riqueza es el origen de las ansias inmoderadas.”
Es obvio que aquí la šahwa (شَهْوَة) significa cualquier interés excesivo, sensual y lujurioso. Ya sea que esté relacionado con la lujuria sexual, la posición, la pompa y el boato mundanos, la venganza y similares. También está claro que la riqueza juega un papel importante en la consecución de los deseos y anhelos sensuales, y cuanto más aumenta, mayor es el riesgo de caer en la lujuria.
Relacionado: Explicación al Nahy-ul Balâghah: Ḥikma 57
Además, la riqueza es fuente de orgullo y vanidad, que son la raíz de muchos pecados. Además, cuanta más riqueza tiene una persona, más intranquila se vuelve, y naturalmente, le impide recordar a Dios y obedecer la verdad. Basándonos en estos tres aspectos, se puede comprender la profundidad de las palabras del Imam.
Es obvio que lo que el Imam dijo en este sabio discurso es una advertencia para la mayoría de la gente: no se afanen por la riqueza excesiva, pues conlleva muchos peligros. Sin embargo, no todo rico es amante de la lujuria. Esta regla general, como otras reglas similares, tiene excepciones. Un grupo numeroso siguió el camino de Qarun, y su riqueza se convirtió en motivo de orgullo e incredulidad. Un grupo pequeño también utilizó la riqueza para lograr los actos más importantes de obediencia a Dios.
Este significado se afirma en los versículos relacionados con el Corán: “Buscad la morada del Más Allá en lo que Allah os ha dado, y no olvidéis vuestra parte de este mundo, y haced el bien (a Sus siervos) como Allah os ha hecho bien, y no busquéis la corrupción en la tierra, porque Allah no ama a los corruptores.” (Qaṣaṣ, 77)
(وَابْتَغِ فِیمَا آتَاکَ اللهُ الدَّارَ الاْخِرَةَ وَلاَ تَنسَ نَصِیبَکَ مِنَ الدُّنْیَا وَأَحْسِنْ کَمَا أَحْسَنَ اللهُ إِلَیْکَ وَلاَ تَبْغِ الْفَسَادَ فِى الاَْرْضِ إِنَّ اللهَ لاَ یُحِبُّ الْمُفْسِدِینَ);
Es sobre esta base que en muchos versículos del Corán se critica la riqueza y en algunos versículos se la alaba y ensalza, y se la menciona como algo bueno.
En el versículo 180 de la Surah Al-Baqarah, se dice acerca de los testamentos: “Una persona que ha dejado bienes…” (اِنْ تَرَکَ خَیراً). Y en el versículo 8 de la Surah Al-‘Adiyat, al condenar a algunos de los rebeldes, dice: (وَإِنَّهُ لِحُبِّ الْخَیْرِ لَشَدِیدٌ) -“Ellos aman mucho la propiedad.”
En las narraciones islámicas también se ven en abundancia rastros de esta condena y alabanza respecto a la riqueza, y mencionarlos nos alejaría de la explicación de este versículo.
Sólo mencionaremos aquellas narraciones significativas que fueron narradas por Ibn Abbas y que él solía escuchar del Santo Profeta (la paz y las bendiciones de Allah sean con él y su familia) o del Comandante de los Creyentes Ali (la paz sea con él). Él dice: Satanás echó un vistazo a las primeras monedas de dirham y dinâr acuñadas en la tierra. Al verlas, las tomó, se las puso sobre los ojos y luego las apretó contra su pecho. Con un grito de alegría, las apretó de nuevo contra su pecho y les dijo: «Sois la luz de mis ojos y el fruto de mi corazón. Si los hijos de Adán os aman, me conformo con eso, aunque no adoren a ningún ídolo (¿qué ídolo es superior a vosotros?). Me basta con que los hijos de Adán os amen» – («إنَّ أوَّلَ دِرْهَم وَدینار ضُرِبا فِی الاْرْضِ … أنْ یُحِبُّوکُما) (Biḥār al-Anwār,vol III, 137 )
En resumen, la propiedad es una herramienta común, como la energía atómica, que puede utilizarse para fabricar bombas devastadoras o generar electricidad para iluminar el mundo y operar fábricas. Sin embargo, cuando este poder al caer en manos de los malvados, suele emplearse de forma destructiva.
Nota:
La cadena de transmisión: Esta sabia palabra se menciona en la misma frase en el libro Ghurar al-ḥikam wa durar al-kalim, Mağma’ al-Amṯāl al-Maydanī y Ma’alib al-Su’ul. (Muṣādar Nahj al-Balāghah, vol. 4, pág. 50). En el libro completo Tamām Nahj al-Balāghah, también citó este sabio dicho en el sermón “Wasilah”. (Tamām Nahj al-Balāghah, pág. 162).
NARRACIONES RELACIONADAS AL HIKMA
- ḥikma 316:
“وَ قَالَ علی (علیه السلام): أَنَا يَعْسُوبُ الْمُؤْمِنِينَ، وَ الْمَالُ يَعْسُوبُ الْفُجَّارِ”
– Y dijo (la paz sea con él): “Yo soy el líder de los creyentes y las riquezas es el líder de los alevosos.”
- ḥikma 269:
وَ قَالَ علی (علیه السلام): النَّاسُ فِي الدُّنْيَا عَامِلَانِ؛ عَامِلٌ عَمِلَ فِي الدُّنْيَا لِلدُّنْيَا، قَدْ شَغَلَتْهُ دُنْيَاهُ عَنْ آخِرَتِهِ، يَخْشَى عَلَى مَنْ يَخْلُفُهُ [يُخَلِّفُ] الْفَقْرَ وَ يَأْمَنُهُ عَلَى نَفْسِهِ، فَيُفْنِي عُمُرَهُ فِي مَنْفَعَةِ غَيْرِهِ؛ وَ عَامِلٌ عَمِلَ فِي الدُّنْيَا لِمَا بَعْدَهَا، فَجَاءَهُ الَّذِي لَهُ مِنَ الدُّنْيَا بِغَيْرِ عَمَلٍ، فَأَحْرَزَ الْحَظَّيْنِ مَعاً وَ مَلَكَ الدَّارَيْنِ جَمِيعاً، فَأَصْبَحَ وَجِيهاً عِنْدَ اللَّهِ، لَا يَسْأَلُ اللَّهَ حَاجَةً فَيَمْنَعُهُ [فَيَمْنَعَهُ]
Y él (la paz sea con él) dijo: “La gente del mundo se divide dos grupos: uno es aquél que en el mundo trabaja para el mundo y el mundo evita que realice algo para su otra vida, está apurado por la pobreza de sus sobrevivientes y no siente apuro por la suya (su pobreza en la otra vida), entonces gasta su vida en el sendero de la ganancia y beneficio para los demás. Y el segundo grupo es aquél que en el mundo trabaja para la otra vida y los favores del mundo también le favorecen sin esfuerzo, entonces ha aprovechado la ganancia y se convierte en el dueño de estos dos mundos, mientras que comienza su día ante Dios en forma honorable, y no pide nada a Dios, sino que Dios le da todo.”
- ḥikma 270:
وَ رُوِيَ أَنَّهُ ذُكِرَ عِنْدَ عُمَرَ بْنِ الْخَطَّابِ فِي أَيَّامِهِ حَلْيُ الْكَعْبَةِ وَ كَثْرَتُهُ، فَقَالَ قَوْمٌ لَوْ أَخَذْتَهُ فَجَهَّزْتَ بِهِ جُيُوشَ الْمُسْلِمِينَ كَانَ أَعْظَمَ لِلْأَجْرِ وَ مَا تَصْنَعُ الْكَعْبَةُ بِالْحَلْيِ، فَهَمَّ عُمَرُ بِذَلِكَ وَ سَأَلَ عَنْهُ أَمِيرَ الْمُؤْمِنِينَ (علیه السلام) فَقَالَ:
إِنَّ هَذَا الْقُرْآنَ أُنْزِلَ عَلَى النَّبِيِّ (صلی الله علیه وآله) وَ الْأَمْوَالُ أَرْبَعَةٌ: أَمْوَالُ الْمُسْلِمِينَ، فَقَسَّمَهَا بَيْنَ الْوَرَثَةِ فِي الْفَرَائِضِ، وَ الْفَيْءُ فَقَسَّمَهُ عَلَى مُسْتَحِقِّيهِ، وَ الْخُمُسُ فَوَضَعَهُ اللَّهُ حَيْثُ وَضَعَهُ، وَ الصَّدَقَاتُ فَجَعَلَهَا اللَّهُ حَيْثُ جَعَلَهَا؛ وَ كَانَ حَلْيُ الْكَعْبَةِ فِيهَا يَوْمَئِذٍ، فَتَرَكَهُ اللَّهُ عَلَى حَالِهِ وَ لَمْ يَتْرُكْهُ نِسْيَاناً وَ لَمْ يَخْفَ عَلَيْهِ [عَنْهُ] مَكَاناً؛ فَأَقِرَّهُ حَيْثُ أَقَرَّهُ اللَّهُ وَ رَسُولُهُ. فَقَالَ لَهُ عُمَرُ لَوْلَاكَ لَافْتَضَحْنَا، وَ تَرَكَ الْحَلْيَ بِحَالِهِ.
En la época del califato de ‘Umar se dialogó respecto a la gran cantidad de joyas y adornos que había en la Ka’bah. Un grupo propuso: “Empléalo en el ejército del Islam, la Ka’bah no necesita de oros ni adornos”. Cuando preguntaron a Hazrat ‘Ali (as) a esto respecto dijo:
En verdad que el Sagrado Corán fue revelado al Profeta del Islam (PBD) cuando las riquezas se dividían en cuatro: las riquezas de los musulmanes que eran dividida según la parte a cada uno de los que quedaron sobreviviente, y los botines de guerra que eran dados a los necesitados, y el jums (el quinto) que Dios determinó su utilización, y la limosna que Dios mostró los medios de su dádiva. Mientras que las joyas y adornos de La Ka’bah eran parte de las riquezas que Dios no ordenó nada para ellas, no por olvido ni tampoco por no haberlas visto. Tú déjalas también tal y como están, al igual que Dios y Su Profeta las dejaron en ese estado. ‘Umar dijo: “Si tú no estuvieses me hubiese desacreditado públicamente”. Y dejó los adornos en la Ka’bah.
