SHAFAQNA | por Mohsen Sahraei Kashani : Ibn ‘Abbâs relata del Profeta Muhammad (PBD) un largo dicho que contiene el gran mérito del ayuno de cada día de Ramadán y las súplicas para cada día.
Estas súplicas las puede hacer en cualquier momento del día sobre todo después de cada oración.
La súplica del tercer día del mes Ramadán
اللَّهُمَّ ارْزُقْنِي فِيهِ الذِّهْنَ وَ التَّنْبِيهَ، وَ بَاعِدْنِي فِيهِ مِنَ السَّفَاهَةِ وَ التَّمْوِيهِ، وَ اجْعَلْ لِي نَصِيبا مِنْ كُلِّ خَيْرٍ تُنْزِلُ فِيهِ، بِجُودِكَ يَا أَجْوَدَ الْأَجْوَدِينَ
al·lâhumma-r zuqnî fîhidh dhihna uat tanbîh ua bâ’idnî fîhi mina-s safâhati ua-t tamuîh uaÿ‘al lî nasîban min kul·li jairin tunzilu fîhi biÿûdika iâ aÿuadal aÿuadîn.
¡Oh, Dios mío, agráciame en este (día) con la conciencia y la atención y aléjame en este (día) de las vanidades y de la ignorancia, y hazme partícipe de toda bondad que desciendas en este (día). ¡Por tu Munificencia, oh, el más Munífico de los Muníficos!
Una breve explicación:
Hoy en el tercer día del mes de Ramadán pedimos a Dios que nos agracie con la conciencia y la atención y nos aleje de las vanidades y de la ignorancia y que nos haga partícipe de toda bondad que descienda en este (día).
La conciencia y la negligencia:
Unas de las bendiciones que Dios ha otorgado a sus siervos creyentes es la conciencia. Un creyente siempre busca la verdad y evita la falsedad. Un creyente conoce su estado entre las creaciones y bien sabe que Dios le ha dado un gran valor. Dios le ha elegido para sí mismo y le ha regalado una oportunidad , la que nunca se repetirá. Entonces intenta beneficiarla. Esa es la que la llamamos conciencia. En cambio la negligencia es la que un creyente la toma como enemigo y lucha con ella.
Los signos de la negligencia:
Shamun Lawi fue un cristiano famoso de Medina preguntó al Profeta sobre los signos de la negligencia y Él le respondió a su pregunta así:
اَمَّا عَلامَه الغَافِلِ فَاَرْبَعَه اَلْعَمی وَ السَّهْو وَ اللَّهْو وَ النِّسْیانْ
Los signos del negligente son cuatros:
- Ceguera (y cerrar los ojos frente la verdad)
- Indiferencia (en forma que no le importa en qué gasta su capital de su vida)
- Pasar la vida en vano (en forma que se olvida de dónde ha venido a este mundo y por cual objetivo y cuál es su misión y a dónde irá)
- Olvidar (lo que había conocido) (Bihar Al- Anwar – tomo 21- página 122)
Relacionado: La súplica del segundo día del mes Ramadán: Cuál es el criterio de saber la satisfacción de Dios?
El ayuno una bondad de Dios para los siervos:
Un día el Profeta del islam dijo a sus compañeros:
¿Les interesa que les enseñe algo que si lo hacen el diablo se alejará de vosotros como el alejamiento entre Este y Oeste?
Los compañeros respondieron, Sí Oh mensajero de Dios.
El Profeta dijo:
Ayunen que el ayuno hace negra la cara del diablo.
Entonces en el tercer día de Ramadán pedimos a Dios que nos haga partícipe de toda bondad que desciende en este día; pues una de ellas es el ayuno y lo descendido de la bondad por el ayuno.