SHAFQNA – Hispan TV: El presidente de EE.UU., Donald Trump, ha afirmado desde el Despacho Oval en la Casa Blanca que estas sanciones golpean la economía iraní “directamente al más alto nivel” y ha instado a Teherán a “detener todos los actos de violencia y terror”.
Según un comunicado emitido por el Departamento de Tesoro de EE.UU., los nuevos embargos afectan también al Fondo Nacional de Desarrollo de Irán y la compañía iraní Etemad Tejarate Pars. La nota acusa al BCI de haber financiado al Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, al que Washington colocó en abril en su lista de “grupos terroristas”.
El secretario de Tesoro estadounidense, Steven Mnuchin, ha alegado que las nuevas sanciones cortan supuestamente la última fuente de fondos restante para Irán.
Trump anunció que había ordenado un “incremento sustancial” de las sanciones contra Irán, tras el ataque perpetrado el 14 de septiembre a las refinerías saudíes, del que Washington y Riad acusan a Teherán, sin prueba alguna, y este rechaza categóricamente.
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El magnate estadounidense también planea examinar varias opciones militares contra Irán, pero sigue reticente a autorizar una intervención a gran escala como castigo por el ataque a la petrolera saudí Aramco, reivindicado por las fuerzas armadas de Yemen.
El diario local The New York Times ha afirmado que las opciones que propone el Departamento de Defensa (el Pentágono) a Trump no incluyen ataques a gran escala y se centran más bien contra algunos objetivos militares en Irán.
Como siempre Trump ha dado señales contradictorias sobre su posible respuesta a los ataques, y insinuó su reticencia a optar por la vía militar al afirmar que, aunque tiene a su disposición la “opción máxima”, también podría escoger “otras opciones”.
También ha rebajado ligeramente su retórica el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, luego de que la República Islámica advirtiera que responderá inmediatamente a cualquier agresión en su contra y que su represalia no se limitará a la “fuente de amenaza”.